Vicente del Bosque fue un madridista como el escudo. Siempre se dedicó al Real Madrid, comenzó en sus categorías inferiores y no se fue a otro club a retirarse (sólo estuvo en otros dos equipos y porque fue en cesiones.). Sintió al Madrid como jugador y como entrenador muy cerca del corazón y es uno de los grandes ídolos de la afición. Hasta fans de otros clubes le aplauden y le alaban.
Es de los que más partidos ha jugado en el Real Madrid con 441 partidos. Era un centrocampista muy tranquilo, quizá algo lento pero esa lentitud la usó para dar mucho orden al juego y demostrar que tenía mucha visión de juego.
Ganó cinco títulos de Liga y cuatro títulos de Copa del Rey. Fue internacional en 18 ocasiones con España, jugando la Eurocopa de 1980.